50 Sombras, capítulo 6. «A lo loco-co, a lo loco-co»

El análisis de este capítulo comprende de la página 71 a la 85.

Hemos dejado a Anastasia en las nubes porque Grey acaba de darle un beso “con forcejeo” como ella dice en el ascensor. Y en el primer párrafo encuentro algo que no entiendo: “Me toco los labios, hinchados por el beso.” A mí nunca me ha pasado eso a no ser que me lleve una tarde o noche entera haciendo lo mismo, en cuyo caso da la sensación de haber comido palomitas muy saladas. Pero por cuatro besos con ganas la verdad que nunca me ha pasado. En fin, Anastasia y su anatomía.

La lleva a su casa sin preguntar su dirección porque obviamente, tras enviarle los libros, la sabe, “¿Cómo no iba a saberlo un acosador que sabe rastrear la localización de un móvil y que tiene un helicóptero?” Joder, es obvio que la sabe, ay, mi acosador, que tontorrón ♥ Quiero volver a recordar lo sumamente peligroso que esto sería en la vida real.

Al llegar a casa, Kate se despide del hermano de Grey con un beso que quita el sentido. Anastasia se siente claramente celosa y, además, un poco envidiosa de su amiga Kate, que “siempre se las arregla para cazar hombres.
OK.
Y le pregunta a Ana si ya ha tenido relaciones a lo que ella contesta que no pero que se muere de ganas, por lo que la amiga asume directamente que está enamorada. No más caliente que el hierro de una plancha, no. Enamorada.

—Uau. Por fin Ana Steele se enamora de un hombre, y es Christian Grey, el guapo y sexy multimillonario.

—Claro, claro, es solo por el dinero.”

Nah, también porque está bueno. O por su grandeza de corazón, su amabilidad, respeto, confianza y comprensión. Síp.

Se ha depilado entera para la cita de la noche no porque ella quiera, no, sino porque Kate “me asegura que es lo que los hombres esperan en estas circunstancias.” Le tienes que gustar con pelo o sin él y si decides depilarte, que sea por ti, no por agradar. Y ojo que no sabe por qué Kate no se fía de Grey. Y yo aquí que me sentaba con ella y le daba toda una lista de motivos.

A José que le den por culo Anastasia, como le respondas a los mensajes o le llames ya es lo que me faltaba.

Vale, están en el helicóptero privado de Grey y se van a saber dónde. Me resulta un poco de imbécil prepotente que cada vez que nota que ella se queda mirándole embelesada le recuerde que tiene que respirar. “Respira, Anastasia.” Le falta decir que sabe que es arrebatador pero que, chica no es para tanto.

Con este libro lo que me pasa es que todo me parece digno de mención porque, o los personajes dicen o piensan una barbaridad, o la escritora hace algo que me obliga a hacer un facepalm mental. Por ejemplo: Los ya famosos “¡Uau!” a los que no me voy a acostumbrar; los “¡Christian me ha guiñado un ojo!” y demás exclamaciones cada vez que Christian… ¿respira? Es que cuando se la meta va a explotar. Y os voy a poner un ejemplo de que Grey es verdad que está muy bueno. Solo que es basura por dentro y eso lo estropea un pelín.

Tiene un perfil muy bonito, la nariz recta y la mandíbula cuadrada. Me gustaría deslizar la lengua por su mandíbula. No se ha afeitado, y su barba de dos días hace la perspectiva doblemente tentadora. Mmm… Me gustaría sentir su aspereza bajo mi lengua y mis dedos, contra mi cara.

Esto podría ser algo que yo escribiese, (a lo mejor de otra manera), pero no difiere mucho de lo que una piensa cuando mira a un tío que está tan bueno. (O de lo que pienso yo mirando a Nagase, Markiplier, Godfrey Gao, Jensen Ackles…) El problema, repito, son todas esas alusiones y actos acosadores con promesas veladas de maltrato. Si no pareciese tan hijo de puta…

—No tienes que hacer nada que no quieras hacer. Lo sabes, ¿verdad? — Su tono es muy serio, incluso angustiado, y sus ojos, ardientes. Me pilla por sorpresa.

Pues mira, normal que te pille por sorpresa. Hasta ahora la ha ido a buscar al bar al que le exigía, quisiese o no, que le diese la dirección. Y de no haberse desmayado se habría llevado a la fuerza, por su seguridad, claro. La ha obligado a comer cuando no tenía ganas porque, vamos a ver, tiene que alimentarse tenga o no tenga ganas, que para eso está él al mando. Le ha dicho que la habría castigado por su comportamiento y que se llevaría dos días sin poder sentarse, y es que el hecho de que te peguen por hacer algo que tú has elegido hacer como persona adulta es algo que a todo dios le gusta y que siempre quiere hacer. Y no estamos hablando de azotes sexuales precisamente. Ha dormido con ella sin consultarle y bueno, lo del ascensor no cuenta porque, claramente, Anastasia quería. Pero eh, que ahora le dice que no tiene que hacer nada que no quiera hacer, que no quede de violador, eso nunca. Que da el perfil, pero no, él no. Y esto es lo verdaderamente preocupante ↓

“—Nunca haría nada que no quisiera hacer, Christian.

Y mientras lo digo, siento que no estoy del todo convencida, porque en estos momentos seguramente haría cualquier cosa por el hombre que está sentado a mi lado.”

Le voy a decir que sí aunque no esté convencida porque es que es tan guapo y tan millonario que ahora mismo haría cualquier cosa por él. Porque, seamos sinceros, Grey no le ha mostrado nada positivo que no sea pasión, lujuria, un cuerpo bonito y una cartera inflada, no está enamorada de su personalidad precisamente. Que si me dices que está loca por follarselo, ok, no pasa nada, para tener relaciones con una persona no tiene que gustarte al 100%. Es sexo, es físico, lo entiendo. Pero, ¿enamorada? Joder, al menos ten una charla con él algo más profunda.

Creo que a esta le pones a Donald Trump con la apariencia de Grey y también se enamora. Que va ella a construir el muro con su diosa interior, vaya.

65487334-352-k606929

«Se ha puesto bien el peluquín, ¡uau!»

Atención llegamos a…

EL ACUERDO DE CONFIDENCIALIDAD

Ya la primera condición ha sonado a alarma escandalosa, la que suena al final del resident evil 2, pues esa.

—¿Qué implica este acuerdo?

—Implica que no puedes contar nada de lo que suceda entre nosotros. Nada a nadie.

Ya con eso está más que claro que no firmo nada. Y si me quedo sin follar, me quedo sin follar, pero es que prefiero eso a que me haga algo que no me guste o me fuerce y que encima no puedo denunciar en caso de necesitarlo porque ese acuerdo no me lo permite. Y hay que tener en cuenta que este hombre tiene que tener los mejores abogados que existen, como para meterte en juicios. Y aquí viene la abrumadora inteligencia de Ana.

“Lo observo sin dar crédito. Mierda. Tiene que ser malo, malo de verdad, y ahora tengo mucha curiosidad por saber de qué se trata.

—De acuerdo, lo firmaré. Me tiende un bolígrafo.

—¿Ni siquiera vas a leerlo?

—No.”

wow

Y ha firmado sin leer, señoras y señores. Luego vienen los disgustos y los te lo dije, va a flipar esta. Y flipando estoy yo, que Grey le ha dicho que él no hace el amor, que él folla duro. La primera en la frente Ana, qué poquito te va a durar la imagen de caballero de romancero que te has montado. Le va a mostrar el cuarto de juegos y ella piensa en lo que de verdad le habría dado puntos a grey, videoconsolas, pero no. No hay videoconsolas. Cuando abre, esto suelta Ana.

Y siento como si me hubiera transportado al siglo XVI, a la época de la Inquisición española.”

Y ya has firmado. 

Hasta ahora tenemos:

  • Un excesivo uso de “Uau”
  • Una inocencia a punto de ser destruida.
  • Un contrato oficial de futura mujer maltratada.
  • El sótano del hotel de H.H.Holmes.

Ya en el siguiente tiene que haber algo más que diosas interiores y exclamaciones por besos o guiños. Y un poco más de maltrato físico, emocional o psicológico, por favor, no me dejes sin mi dosis.

boton50

9 comentarios en “50 Sombras, capítulo 6. «A lo loco-co, a lo loco-co»

  1. Me ha encantado la parte de Nelson y la alarma del RE2 xDDDDDDD La escritora un poco más y no tiene una mente de niña de 13 años. De verdad, ¿cómo se puede escribir así? Cada vez me da más asco el libro. Mal escrito y con una falta de feminismo asombrosa. El personaje que más o menos (porque no sé si ha habido más veces que ha hablado) tiene sentido común, Kate, no habla apenas ni da argumentos que puedan hacer abrir los ojos a Ana (también acabaría el libro en el cap.1 con esto xD). Qué poco se quiere a sí misma Ana. Más que «excitarme», el libro me da verdadera pena.

    Me gusta

    • A mí de momento Kate es la que más me gusta también, que suelta sus perlitas de «depílate que es lo que a los chicos les gusta» pero se le perdona por ser sensata y hacer lo que le sale del alma con su cuerpo sin pedir excusarse.

      Me gusta

  2. Pues por la regla de tres de la amiga de Anastasia, yo tengo que estar enamoradíiiiisima hasta las trancas de Neymar… o del Joker de Jared Leto… o de Negan… o de Rick… o de… (de Rubius sí, lo estoy…), porque en fin… que te voy a decir que no sepas… madre mía, Willy…

    Me gusta

  3. Acabo de leerte desde el capítulo 3 hasta este. Definitivamente quién ha escrito este libro es una fan cachonda de Crepúsculo. Lo de ir a recogerla al bar estando borracha y el aléjate de mi, que soy peligroso es de Edward Cullen 100%. Fijo que también destrozan la cama y la deja llena de moratones, clarostá. Estoy muy flipada. He llegado a pensar que es Stephanie Meyer bajo un pseudónimo, que hizo muy light sexualmente hablando Crepúsculo y se le quedaron guarrerías en el tintero, que Edward hasta el matrimonio nada

    Le gusta a 1 persona

    • Vamos a ver, que es verdad lo de que es un fanfic de crepúsculo, que no es broma. Lo hizo en fanfiction.net y tuvo tanta fama que se lo publicaron. Yo siempre lo digo, Grey tendría que ser Robert Pattinson

      Me gusta

    • Una mierda así ha vendido tantas copias porque tiene un editor con duros que le ha hecho una estrategia de márketing maravillosa. Yo, que soy pobre y escribo en español, ni a la vuelta de la esquina voy a llegar.

      Me gusta

Replica a Tifa Sugar Cancelar la respuesta